miércoles, 1 de abril de 2009

El poder de la mente




Ayer derramé varias lágrimas por una guerra sin fin. creía haber dado, el amor que nunca fue entregado. Quería estalla en pedazos, quería olvidar todo, todo lo demás, y volar. Alguien me enseñó el significado de las guerras y las luchas. Decía que, las guerras no empiezan porque uno le pegue una ostia a otro. Comienzan por una lucha de ideas, es decir, que el rival piensa de una forma opuesta a la tuya, y encima te está tocando las pelotas con ello. Así comienza una guerra. En las guerras mucha gente muere inútilmente, quizás gente con familia, con amigos, quizás gente feliz. Pero por desgracia ellos no pueden elegir vivir o morir, Éste mundo está podrido y no hay manera de poderlo cambiar, pero, el principal problema es que la inmensa mayoría de la gente "confunde" los conceptos. Quiero decir que para la lucha, no es necesario usar la fuerza, sólo hay que tener en cuenta que querer es poder, y que sólo con tu cabeza puedes contrarrestar el ataque enemigo, ya que usando los puños y los gritos , el otro puede reatacar con con la misma medicina, en cambio, si eres capaz de mantener la cabeza sobre los hombros mientras el rival te acribilla con su ansiedad, te puedes considerar vencedor de ésta batalla.Queriendo e intentando saber el punto flaco del adversario, haciéndole sufrir para ganar su terreno. Las heridas en la piel cicatrizan y curan (excepto que mates al otro), pero las heridas del alma tardan mucho tiempo en recuperarse o no se curan nunca. Sólo tenemos que aprender a usar el cerebro, para las cosas malas y el corazón, para las buenas, porque así siempre aprenderemos algo nuevo.


Gracias Migue...

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