Ángel de la guarda

Lo que no entiendo es cómo puedes tener siempre razón, y cómo puedes siempre predecir lo que va a ocurrir, la verdad es que el futuro es incierto, pero cuando dices algo que me disgusta siento miedo por estar a tu lado porque casi siempre ocurre, no sé, y quizá no sepa nunca cómo lo haces. Tanta frustración corre ahora por mis venas que deseo que me lleves a un lugar sólo, sin nadie más que tu, yo y una consola jajaja. Temo seguir el camino que pretendes decirme, y de perderme en el camino hacia la felicidad, pero pienso que quizás tu estés aquí luego para recoger los trozos y guardarlos en lo más hondo de mi interior. Pero tampoco puedo estar seguro de eso, sé que no estarás aquí para siempre, pero antes de irte necesito que me enseñes todo lo que yo pueda aprender. Te voy a decir que intentaré no fallarte, no, ¿qué digo? no te voy a fallar hasta que se demuestre lo contrario. No me voy a dejar guiar por lo que me diga la demás gente, porque "a mi no me parte ni Dios", cosa que tú me enseñaste. No está en mi ser abandonar así como así a una persona que me ha dado todo, que siempre me protege y va rompiendo lanzas siempre a mi favor. Has procurado ver los peligros de éste mundo que yo no vi, avisándome antes de caerme y antes de sucumbir. Aquí empieza el día y traigo muchas recompensas para ti, son muchas mis deudas y las llamas que encendiste. Tú siempre cuidado aquel tallo que aún está por crecer.